jueves, 5 de julio de 2012

La Eurococa y mi casa, y la de todos

La resaca de la Eurocopa nos deja un país con dolor de cabeza de tanta exaltación de la patria y una casa que amanece sucia, llena de vasos vacíos y con la cisterna rota de la fiesta de ayer. En la encimera de la cocina las cartas de los bancos, manchadas con círculos de los cubatas que pusieron encima, nos dicen que no hemos pagado ni la hipoteca ni los préstamos personales. La carta de la luz nos anuncia una subida (otra más) mientras el presidente de la escalera nos manda al secretario para decirnos que nos hemos pasado pero a él no hay quien le vea.
Me quito definitivamente la camiseta de España y al asomarme a la ventana veo que en la casa de al lado los vecinos han llamado al que les prestaba el dinero para sus cosas porque parece que les ha estado robando por la cara. El tío ha tenido que explicarse en la Junta de Vecinos de las "Zonas Comunes" que le llaman ellos y parece que le va a caer una buena. En mi escalera el tío que nos prestaba dinero dice que no tiene más y que o le damos más dinero o se arruina. Nuestro presi está de acuerdo porque es su amigo así que nos toca otra derrama para que su ruina no nos arruine a nosostros, pero el tío no ha dado la cara...
Definitivamente pongo la camiseta de España y las banderas a lavar. Con tanta juerga se han ensuciado. Debo tener cuidado porque este año hay sequía. En mi edificio habíamos puesto un tanque nuevo de agua en la azotea que nos costó una pasta a todos y que le llamamos Meloneros porque cabían millones de melones. Pero resulta que aunque el tanque de agua está puesto en su sitio e incluso está lleno de agua... a nadie se le ha ocurrido hacer las conducciones hasta las casas así que no podemos usar ese agua.
Ya tengo mi camiseta de España limpita. ¡Qué bien lo pasé con los goles de La Roja! Subo a la azotea a tenderla pero al llegar arriba me informa el secretario de mi edificio que el presidente ha dicho que a partir de ahora hay que pagar por tender. Se paga por prenda colgada, por tiempo expuesta al sol y por el número de pinzas que uses para tender. Cuando me he quejado me ha dicho que si luego uso menos de lo que me toca me devuelven el dinero a los 6 meses. Me ha dado un cuadrito explicando las medidas pero en realidad son un lío. Mi vecina del cuaro es muy mayor y sube todos los días porque tiene mucha ropa sucia y la pobre se hace un lío porque no sabe cuanto tiene que pagar por colgar sus bragas y menos aún por la combinación.
Al bajar las escaleras me he cruzado con una del segundo. Una valenciana muy maja que parecía agobiada porque su padre, que es el que manda, parece que se ha gastado un dineral. En casa todos se creían que eran ricos porque el padre no hacía más que hacer obras suntuosas, puso un baño de mármol, un cuarto de juegos para los niños impresionante, una tele carísima, plantas por todos lados, una cocina espectacular... Incluso se compró un coche que parecía de competición y una plaza en un helipuerto aunque no tenían helicóptero, que ella supiera.
Me ha dicho que de pronto comenzaron a llegar cartas de los bancos de los amigos de su padre diciendo que debían una barbaridad. Su padre las escondía pero un día su madre las encontró y ahora saben que están aurrinados... Pero como es su padre pues le quieren igual. En fin, hay gente para todo.
llego a mi casa, guardo mi camiseta de España y pienso qué está pasando en mi casa, en mi finca... ¿O yo me he despistado mucho con la Eurocopa o las cosas estaban ya cada vez peor? Menos mal que ahora vienen los Juegos Olímpicos y luego comienza la Liga.