lunes, 16 de mayo de 2011

Hay que ir a votar el día 22

Entramos en la recta final de la campaña electoral y ayer mismo se juntaban más de 8.000 personas en Sevilla, más de 2.000 en Oviedo; en Barcelona, Madrid.. Y así en más de 60 ciudades de España para pedir otra manera de hacer las cosas, para pedir democracia real, justicia real y economía real. Algo deben estar haciendo mal los políticos, jueces y banqueros para que eso suceda justo en estos días.
Mientras, las encuestas dan una clara victoria al PP en casi todo el país. Pero las encuestas son eso, radiografías del momento elegido para hacerlas. Y con tan pocos días para las elecciones, las posibilidades de reacción son pequeñas, aunque reales.
El PP ganará si consigue que los electores que se consideran de izquierdas, se quedan en casa, porque en España, la mayoría de la población se considera de centro izquierda, pero ese segmento de ciudadanos está poco movilizado y tiene un mayor nivel de exigencia hacia sus representantes que los de derechas. Un ejemplo: Mientras que el caso de los ERES en Andalucía le está haciendo un daño indiscutible al PSOE, el caso Gurtel apenas incide a Camps en Valencia.
Pero quedarse en casa es dejar que decidan otros por ti. Por eso y porque después no valdrá de nada quejarse, o decir que ese no es el modelo de ciudad o comunidad autónoma que me gusta, hay que ir a votar el 22-M. Para que los alcaldes que salgas elegidos, tengan el mayor respaldo posible de la ciudadanía. En unos momentos tan delicados como estos, es importante dar lecciones de democracia. Hay que votar no por los políticos, ni por los partidos, hay que votar por cada uno de nosotros, porque nos merecemos un futuro mejor, nos merecemos decidir cómo queremos que sea ese futuro.

1 comentario:

Er Cabeza dijo...

Efectivamente Chicho, coincido contigo en que hay que ir a votar, porque de lo contrario sería como negar la democracia misma, con el trabajo y sangre que nos ha costado a la sociedad española poder disfrutar de ella.
Sin embargo, tras continuados años de saqueo institucional generalizado, en todos los partidos políticos y comunidades sin excepción, en mi caso votaré en blanco. Votaré por la Democracia, pero no por ninguno de los que se autoproclaman a los cuatro vientos defensores de la libertad y la democracia, escondiéndose (cada día con mayor dificultad, la gente no es tonta) debajo de su discurso un único interés: el sillón, la "poltrona". Es desolador observar el "y tú más" de la campaña electoral, en vez de debatir los problemas que verdaderamente interesan a la mayoría, abrir debates constructivos, aceptando la diferencia de criterio de nuestro vecino, pero desde la razón, no desde el rencor ni el odio.
Lo dicho, a votar el 22M, pero en BLANCO.

Abrazos