jueves, 5 de marzo de 2009

No me gusta el conejito

No soporto a las chicas Playboy, al conejito y a la madre que los parió. Y no entiendo que haya chicas que, motu proprio, se compren pegatinas de tan poco acertada multinacional y la pongan en sus coches carpetas y cuartos, como tampoco entiendo que haya quien se compre ropa con el dichoso conejito como reclamo.
Llámenme carca o intolerante. Me da igual. Creo que mi actitud es justo la contraria. Hace ya años que todo lo que huele a pornografía y prostitución me repele. En primer lugar me parece un abuso de la mujer, y me da igual que ésta lo consienta. Hay gente que se quiere suicidar y no les dejamos, ¿no? Pues lo mismo. Son dos fenómenos que en el fondo lo que está presente es la dominación del hombre, el uso y abuso de la mujer como objeto y es denigrante se mire por donde se mire.
Pero es que en el caso de Playboy además me parece súper cateto. Es erotismo de fritanga, sin el más mínimo glamour. Un desnudo de mujer puede ser arte, claro que si. Hay miles de ejemplos de desnudos de mujeres que son verdaderas obras de arte en el ámbito de la pintura, la escultura y por supuesto, de la fotografía. Pero ese chiringuito de conejitas operadas es cutre y salchichero, se aprovecha de infinidad de salidos incultos y pobres incautas que, bajo la bandera de la libertad de expresión y el arte, se dedican a explotar a personas a cambio de un más que dudoso triunfo y sueldos que raras veces llegan para el bocadillo y el autobús.
Chicas, llevar un pantalón corto con el conejito NO ES SEXI!!!!! Es una gilipollez. Chicos, regalar un bolso con el conejito ES UNA TONTERIA!!!!! Y ni qué decir tiene salir en una de sus páginas o adquirir alguna de sus revistas.
Los dueños de playboy tienen derecho a sacar su revista y yo a decir que no me gusta.

1 comentario:

Alfonso Saborido dijo...

Y encima, en los canales digitales te obligan a pagar un plus por verlo...